viernes, 19 de abril de 2024

Al mar

 El micro viejo avanzaba

como un terremoto cansado

y me llevó hacia otro viento.

 

En un hotel sin ventanas

dejé las cosas: una birome seca,

un bolso, llaves de mi hogar.

 

La arena de la playa

me pareció sucia,

fría,

y la gente

se desarmó en el agua:

una cabeza y un brazo,

un pie. Nada.

 

Construí castillos

enfrentando la marea

y junté piedritas,

un cementerio de soldados

que murieron

defendiendo a su señor del agua

y de la sal.

 

Tres días mudos

y después un bondi

distinto

me devolvió a la ciudad.

martes, 16 de abril de 2024

Son tan distintas

Un millón

de hormigas arrastran

hojas en llamas.

 

Firmes sus pinzas,

firmes sus pisadas.

Sus ojos

lloran por el humo.

Casi corriendo

una línea roja cargando muerte.

 

Me quedo helado.

 

− ¡Arderá en llamas el hormiguero! −

les diría

si mis palabras atravesaran su exoesqueleto.

 

¿Tienen orejas?

Son tan distintas

todas en fila.

 

Intento hablarles

                                   desesperado:

si no hacen algo

esta noche

el fuego llegará bajo la casa

 

y arderá.

lunes, 16 de enero de 2023

Dos poemas de un viaje al sur

 Las raíces de los cipreses y los arrayanes

crecen entre las piedras

y hacen cosquillas a las montañas

y las montañas tienen cosquillas

solo que son cosquillas lentas.


                                                       El bolsón, enero 2023



Sería un día en la montaña

Sería

           entre las amancay y las piedras y las retamas

Sería bajo el canto de los chingolos

sobre el río Azul, sería

el olor de los musgos sobre los troncos

el olor de las hojas que se parten 

                                   bajo los pies en la montaña

 

                                                    Refugio del Cajón del Azul, enero 2023


lunes, 29 de julio de 2019

Una década

Pasaron diez años desde el primer post. Diez años llenos de cosas. Gracias por leer.

jueves, 21 de febrero de 2019

Perdido

La calle está muy de gente
que no le sale disimular
que ya perdimos
que los bondis ya no nos pertenecen
que el delivery solo en días de fiesta.

Hay feo olor;
es tu gobierno lo que apesta.

Entre nosotrxs
se arrastran las patas cortas, dando de opciones
gastar palabras
                         o hacer silencio
como en mi barrio, tan quieto que temo
que hasta mis auriculares queden callados
y que el amor también.

Suelto un susurro.